Tanto el Incienso (Boswellia) como la Mirra (Commiphora myrrha) son resinas producidas por ciertos árboles que crecen en ambos lados del Mar Rojo. Junto con el oro, fueron ofrecidas al Señor Jesús por los sabios de oriente como símbolos de su humanidad, sus sufrimientos venideros y de su deidad (Mt. 2:11).
La mirra era usada como parte del aceite para unción (Éx. 30:22) y el incienso era parte de el incienso santo (Ej. 30:34). El incienso también era parte de la ofrenda del tabernáculo ya que 2 copas de oro eran colocadas en el pan de la proposición (uno por cada hilera de seis) (Lev. 24:7).